Conocimos a Michael Chabon
gracias a Las asombrosas aventuras de Kavalier y Clay, libro muy recomendable que
homenajea a los primeros creadores de cómics americanos y que disfrutamos mucho
durante su lectura. Con estos antecedentes poco nos costó decidirnos a adquirir
El Sindicato de Policía Yiddish a pesar de su horrenda portada.
La acción se desarrolla en una
realidad alternativa, una ucronía, en la que el estado de Israel desapareció a finales de los
años cuarenta del siglo pasado y la diáspora judía se reunió en la población de
Sitka, un decrépito asentamiento de origen ruso en la estadounidense Alaska, en
el que la población judía han mantenido durante 60 años un estatus de estado
provisional. Pero esta situación tiene fecha de caducidad ya en pocos meses se
producirá La Revocación, que consiste en la pérdida de este status y los
privilegios de la población de Sitka. Los crecientes rumores señalan que
deberán abandonar el país la mayoría de sus habitantes.
En este decadente ambiente se
halla el cadáver de un yonki, asesinado en su habitación de un decrépito hotel.
El detective Meyer Landsman es el policía asignado al caso y nuestro
protagonista. Alcohólico, insomne y hecho una ruina desde la separación de su
esposa. A pesar de su deplorable estado personal, la investigación va avanzando
poco a poco, hasta acabar descubriendo que el difunto es ni más ni menos que el
Mesías, el Elegido del pueblo judío que les tenía que guiar en el camino a la
Tierra Prometida. Aunque, como resulta evidente, ha desviado ligeramente su
camino. Ni la orden de cerrar el caso por parte de sus superiores ni las trabas
y amenazas encubiertas recibidas tanto de parte de las altas esferas judías de
Sitka como de los enviados del gobierno de los EEUU, impedirán al detective
Landsman continuar adelante hasta resolver todos los enigmas y conexiones que
rodean el asesinato que está investigando.
A pesar de este interesante
planteamiento de realidad alternativa y de cómo el protagonista se da de bruces
con un complot mundial para resolver la provisionalidad del pueblo judío, la
lectura del libro es muy farragosa. Michael Chabon utiliza constantemente palabras en
yiddish –por ello incluye un pequeño diccionario al final del libro- y en argot –suponemos inventado- de Sitka, que
hemos de interpretar por contexto, hecho éste que interrumpe constantemente el
ritmo (imaginar el esfuerzo realizado por el traductor produce vértigo). Pero
no solo eso, nos gustan las metáforas y los símiles, pero el uso y abuso de
ellas por parte del autor, que en muchas ocasiones no aportan nada, se traducen
en parrafadas ciertamente plomizas en que es muy fácil dispersarse y perder el
hilo de la acción. Especialmente en la primera mitad del libro, la narración
avanza a trompicones y las diferentes historias se mezclan y entrecruzan de
manera confusa, mejorando ligeramente en la segunda mitad pero sin desprenderse
de una cierta aridez que acompaña hasta
el final de la lectura.
Defrauda El Sindicato de Policía Yiddish tanto por su espinosa lectura como por el escaso botín que ofrece su desarrollo respecto a
lo ambicioso de su planteamiento.
Michael Chabon en la Wikipedia
Michael Chabon
Recomendación:
Las Asombrosas Aventuras de Kavalier y Clay
Durante la escritura de
esta reseña escuché el maravilloso In Rainbows, sin ninguna duda uno de los mejores discos de los últimos diez años, su hermano pequeño In Rainbows 2, el
fascinante Regiones Devastadas de Blacanova y también el arrollador Beta de los debutantes El Lado Oscuro de la Broca.
Acabas de pinchar mi globo Chabon, inflado pacientemente durante años, años y más años mediante el procedimiento de leer todas las críticas de sus libros pero ninguno de sus libros, a pesar de tener en casa desde hace tiempo 'Los misterios de Pittsburgh' y la novela de Kavalier y Clay. Pero no te preocupes, un parche soberbia ("¡mi criterio huele mejor que el de nadie!") y enseguida me pongo a soplar otra vez.
ResponderEliminarLee Kavalier y Clay. El sindicato de la policía yeddish es una soberana pérdida de tiempo y tengo por aquí Telegraph Avenue, pero entre lo descorazonador que me ha resultado éste y que una amiga que acaba de leer TA lo ha calificado de tostón vacio, como que ha retroducido muchos puestos en la lista de espera.
EliminarSaludo.