domingo, 2 de septiembre de 2012

Cosas de la Vida -dicen. Douglas Adams- Guía del Autoestopista Galáctico.






Desde luego, es bien sabido que unas palabras dichas a la ligera pueden costar más de una vida, pero no siempre se aprecia el problema en toda su envergadura.

Por ejemplo, en el mismo momento en que Arthur dijo «Parece que tengo tremendas dificultades con mi forma de vida», un extraño agujero se abrió en el tejido del continuo espacio-tiempo y llevó sus palabras a un pasado muy remoto, por las extensiones casi infinitas del espacio, hasta una Galaxia lejana donde seres extraños y guerreros estaban al borde de una formidable batalla interestelar.


Los dos dirigentes rivales se reunían por última vez.



Un silencio temeroso cayó sobre la mesa de conferencias cuando el jefe de los vl'hurgos, resplandeciente con sus enjoyados pantalones cortos de batalla, de color negro, miró fijamente al dirigente g'gugvuntt, sentado en cuclillas frente a él entre una nube de fragantes vapores verdes, y, con un millón de bruñidos cruceros estelares, provistos de armas horribles y dispuestos a desencadenar la muerte eléctrica a su sola voz de mando, exigió a la vil criatura que retirara lo que había dicho de su madre.



La criatura se removió entre sus vapores tórridos y malsanos, y en aquel preciso momento las palabras “Parece que tengo tremendas dificultades con mi forma de vida” flotaron por la mesa de conferencias.


Lamentablemente, en la lengua vl'hurga aquél era el insulto más terrible que pudiera imaginarse, y no quedó otro remedio que librar una guerra horrible durante siglos.

Al cabo de unos miles de años, después de que su Galaxia quedara diezmada, se comprendió que todo el asunto había sido un lamentable error, y las dos flotas contendientes arreglaron las pocas diferencias que aún tenían con el fin de lanzar un ataque conjunto contra nuestra propia Galaxia, a la que ahora se consideraba sin sombra de duda como el origen del comentario ofensivo.

Durante miles de años más, las poderosas naves surcaron la vacía desolación del espacio y, finalmente, se lanzaron contra el primer planeta con el que se cruzaron -dio la casualidad de que era la Tierra-, donde debido a un tremendo error de bulto, toda la flota de guerra fue accidentalmente tragada por un perro pequeño.

Aquellos que estudian la compleja interrelación de causa y efecto en la historia del Universo, dicen que esa clase de cosas ocurren a todas horas, pero que somos incapaces de prevenirlas.

- Cosas de la vida -dicen.”




Guía del Autoestopista Galáctico (Douglas Adams, 1979)



It is of course well known that careless talk costs lives, but the full scale of the problem is not always appreciated.



For instance, at the very moment that Arthur said, "I seem to be having tremendous difficulty with my life-style," a freak wormhole  opened up in the fabric of the space-time continuum and carried his words far far back in time across almost infinite reaches of space to a distant Galaxy where strange and warlike beings were poised on the brink of frightful interstellar battle.



The two opposing leaders were meeting for the last time.



A dreadful silence fell across the conference table as the commander of the Vl'hurgs, resplendent in his black jeweled battle shorts, gazed levelly at the G'Gugvuntt leader squatting opposite him in a cloud of green sweet-smelling steam, and, with a million sleek and horribly beweaponed star cruisers poised to unleash electric death at his single word of command, challenged the vile creature to take back what it had said about his mother.

The creature stirred in his sickly broiling vapor, and at that very moment the words I seem to be having tremendous difficulty with my life-style drifted across the conference table.

Unfortunately, in the Vl'hurg tongue this was the most dreadful insult imaginable, and there was nothing for it but to wage terrible war for centuries.

Eventually, of course, after their Galaxy had been decimated over a few thousand years, it was realized that the whole thing had been a ghastly mistake, and so the two opposing battle fleets settled their few remaining differences in order to launch a joint attack on our own Galaxy -- now positively identified as the source of the offending remark.

For thousands more years, the mighty ships tore across the empty wastes of space and finally dived screaming on to the first planet they came  cross -- which happened to be the Earth -- where due to a terrible miscalculation of scale the entire battle fleet was accidentally swallowed by a small dog.

Those who study the complex interplay of cause and effect in the history of the Universe say that this sort of thing is going on all the time, but that we are powerless to prevent it.

"It's just life," they say.

The Hitchhiker's Guide to the Galaxy (Douglas Adams 1979)






Este es un buen ejemplo de lo que nos encontramos dentro del genial libro Guía del Autoestopista Galáctico, primero de los cinco libros que componen la trilogía escrita por Douglas Adams.

Parecer ser que es una obra totalmente de culto en los países anglosajones siendo uno de esos libros que se ha leído todo el mundo (todo el mundo que sabe leer, quiero decir) , incluso se ha llegado a rodar una película sobre ella con Sam Rockwell, Zooey Deschanel y Martin Freeman como protagonistas. 
Mi vasta, profunda y creciente incultura hizo que no tuviese la más remota idea de todo esto. Qué demonios he estado haciendo con mi vida todos estos años para no saber nada al respecto?.

La desbordante imaginación del autor, los conceptos que desarrolla y el omnipresente tono hilarante del libro le convierten en una lectura deliciosa. Además de su planteamiento; la Tierra es destruida en el primer capítulo cuando lo habitual es que en este tipo de historias se explique la lucha de los héroes con tal de salvar nuestro planeta y en la última página el BruceWillis de turno lo consiga.

No deja de haber una base física y filosófica en la obra de Douglas Adams (cualquier acto responde a una motivación previa -Causa vs Efecto-, disfruta del momento porque te puede ser arrebatado, el valor de la amistad, etc etc).

La forma de resolver determinadas situaciones hace que entronque con el "realismo mágico" de la novela sudaméricana. Aunque yo más bien lo denominaría "irrealismo cienciaficcionado".

O esto último no es cierto para nada y a quién recuerda de verdad es a Kurt Vonnegut. En fin, no me hagáis ni caso y leeros la/s novelas.


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