Hace un par de meses visité por
primera vez la fantástica librería Nueva Gigamesh y entre muchos títulos
destacables, estaban absolutamente todas las obras del escritor Marc Pastor.
Recordando lo que disfruté con su última novela, Bioko, no dudé un momento en
elegir otro libro suyo, El Año de la Plaga.
En El Año de la Plaga la acción
se sitúa en una muy calurosa Barcelona en mitad del verano y nos explica las
peripecias de Víctor Negro, un trabajador social instalado en la treintena,
víctima de sus permanentes migrañas y de su incapacidad para superar la ruptura
de la relación con su novia Irene. Sus compañeras de trabajo se empeñan en presentarle
chicas para que supere su círculo vicioso de negatividad pero él refuerza cada
vez más su misantropía hasta que conoce a Dolors, una chica joven, animosa y
muy vital.
Mientras Víctor empieza a
ilusionarse y a dejar atrás a Irene, algo empieza a no funcionar bien en el
trabajo. Se produce una ola de suicidios entre sus usuarios y, en todos los
casos, se encuentra una especie de eucalipto enano en sus casas, hecho éste que
hace desconfiar a Víctor. Ésta es la planta de moda y su presencia crece de
manera vertiginosa. Al mismo tiempo, sus conciudadanos empiezan a comportarse
de un modo extraño; no hay emociones, no hay tensión, todo es conformidad. Para
rematarlo, la televisión emite noticias confusas y contradictorias, cae
Internet y los móviles se quedan sin cobertura mientras el intenso olor dulzón del
eucalipto reina en el ambiente.
De repente, Víctor recibe una llamada
desesperada de Irene pidiéndole ayuda desde el hospital donde trabaja. Al
llegar, tiene la prueba definitiva de que algo no funciona bien y se cerciora
de que no estaba tan equivocado en sus paranoicas sospechas y, sobre todo, descubre
que está en peligro. No solo él, sino toda la raza humana.
Marc Pastor es una rara avis en
nuestras letras. Escribe historias fantásticas. En este caso, tal y como
reconoce, el libro es un homenaje a la película La Invasión de los Ultracuerpos (The Invasion of the Body Snatchers) y nuestro protagonista hace continuas referencias a ella. Al tratarse de un
homenaje la historia del libro no es, precisamente, original pero el gran acierto
de Marc Pastor es describirnos un protagonista que nos es terriblemente cercano
y con el que no cuesta nada empatizar. Al crecer las dificultades Víctor es
consciente de que tiene que ser un héroe y sabe perfectamente que no va a dar
la talla debido a sus inseguridades.
El ritmo de la novela empieza
calmo, siguiendo el día a día del protagonista y con un trasfondo guasón hacia
sus miedos y traumas, derivando en una en una novela de aventuras de ritmo
frenético. Toda la narración está salpicada de referencias cinéfilas,
literarias y musicales al estilo de Alta Fidelidad de Nick Hornby. De hecho,
Víctor Negro tiene mucho en común con Rob Fleming, el protagonista del libro de
Hornby. Me ha gustado sobremanera las dudas del protagonista sobre si el peligro es real o es que está enfermo y
tiene un principio de esquizofrenia con alucionaciones.
El Año de la Plaga es una novela
que se disfruta y devora con fruición y que, creo, tiene fácil adaptación como
guión cinematográfico. Lectura muy
recomendable.
Marc Pastor a la Viquipèdia
Recomendación:
2 novelas leídas de Marc Pastor, 2 aciertos. Apostar por el autor: Montecristo, La Mala dona, Bioko y la reseñada.
Revisitar The Invasion of the Body Snatchers.
Revisitar The Invasion of the Body Snatchers.
Quien no le conozca tiene la oportunidad de descubrir la emotividad de Marcel Cranc.
Me llama la atención las referencias cinéfilas, literarias y musicales, que suelen ser un factor interesante en una lectura. Otras cosas me hacen dudar más, pero le echaré un vistazo.
ResponderEliminarSaludos
A mí también me gusta que la lectura esté trufada de referencias. Creo que puede gustarte, a mí me encantó.
EliminarUn beso.
Tiene buena pinta el libro, no lo conocía pero me gustan las referencias cruzadas en los libros
ResponderEliminarY el tema! Me ha recordado a un libro que leí hace ya tiempo... lo busco
Besos
Qué libro te recordó?.
ResponderEliminarBesos.