Pues a ver a estos neoyorquinos que nos fuimos. Por cuestiones horarias nos perdimos totalmente a los teloneros, Ruidoblanco, aunque si ahora me dicen que tocaron otros o que no tocó nadie, tampoco podría rebatirlo.
Con 5 minutos escasos de retraso, tiempo que aprovechamos para acercarnos a la barra y pedir unas cañas, empezaron con los primeros acordes de Belong –canción que da título a su último y destacable álbum-,
Desde el primer momento se les vió con ganas de comerse el escenario y de hacer disfrutar al público. En ese papel destaca su líder y frontman, Kip Berman, siendo muy comunicativo entre canción y canción. En este papel de intervenir, le acompañó la teclista Peggy Wang-East (objetivo de muchas de las miradas).
La sala estaba llena de un público con ganas de pasarlo bien, intenciones que quedaron refrendadas en el 3er tema de la noche, la popera Heart in your Heartbreak, con la que consiguieron que todos nos pusiéramos a bailar.
Poco después sonaron A Teenager in Love, Come Saturday y My Terrible Friend, en esos momentos ya habíamos constatado que sonaban igual de melódicos que en disco, pero en cambio endurecían las guitarras, creando distorsiones con las que salpicaban las canciones y utilizándolas para alargar los temas para alegría del entregado público.
Everything with you, This Love is Fucking Right fueron otros de los hits que sonaron, manteniendo el alto nivel de toda la actuación, así como consiguiendo que la gente no dejara de saltar y bailar en todo el show, hecho éste ayudado porque prácticamente no dejaron espacio para las baladas.
En la primera canción de los bises, Kip acometió Contender armado solo con su guitarra para después tocarnos 3 canciones más con el resto del grupo.
Contrariamente a las dudas que habían provocado anteriores actuaciones, en esta ocasión el público salió contento y satisfecho de haber contemplado a un grupo en crecimiento.
TPOBPAH tienen claro su sonido, que recoge la herencia melódica de los grupos de jangle pop de mediados de los 80 (Felt especialmente así como el resto de grupos de Creation y Sarah Records) con unas guitarras emponzoñadas deudoras claramente de Jesus & Mary Chain y por ende, de la corriente shoegazera y con algunas gotas de The Cure y The Smiths. Además por el tratamiento que le dan a las guitarras en directo, también pueden aparecer nombres como Superchunk o Yo La Tengo.
Siempre se les ha criticado el no ser originales, pero mientras sigan divirtiéndonos de esta manera, creando tan buenas canciones y plasmándolas en un directo mucho más abrasador que en disco, podrán hacer lo que les venga en gana. O al menos seguirán teniendo mi beneplácito.
El único pero, la ajustada duración del concierto, 75 minutos escasos.
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