En las
entrevistas promocionales de la nueva obra de Pablo
und Destruktion (nombre bajo el que publica el asturiano Pablo G.
Díaz) sorprendió al explicar que mutaba después de su estupendo trabajo
anterior, Vigorexia Emocional. El nuevo disco, Predación, lo iba a producir el gran Paco
Loco, y anticipaba varios cambios: de sello, ahora con Sonido Muchacho,
de la mayoría de los músicos que le acompañaban bajo el nombre de La tribu del
trueno y, especialmente, que los textos girarían preferentemente entorno al
Amor, así con mayúsculas.
Preludio
Corintio es la primera pista y,
como dice su nombre, actúa como breve introducción ambiental recitando en ella
versículos de la Epístola de Pablo (guiño total) a los Corintios, enlazando con
la monumental Puro y Ligero, una canción de contrición y arrepentimiento
de intensidad desbordante, de enorme calado emocional potenciado por el uso de
un bajo omnipresente y preciso que lleva el tempo en una montaña rusa de seis
minutos logrando un tema majestuoso. A continuación llegan un par de temas
poderosos como Un Salario Social y El Enemigo está Dentro, la
primera tenebrosa y con abundante distorsión y la segunda; agresiva,
desquiciada y repleta de carga ideológica avisando del poder del Islam cada más
presente en Occidente.
Tras este
triunvirato de desasosegantes y, por momentos, escalofriantes canciones, Pablo
nos concede un ligero receso en Amor. Una oda al amor intenso e
incondicional, de entrega absoluta, una arenga con proclamas como “El amor es
el premio de los temerarios”. Sigue con A la mar fui por naranjas,
tenebrosa adaptación de una canción tradicional astur que realza mediante un
acertado uso de las guitarras. Tras ella, otra de las cumbres del disco, El
mejor traje de seda, en un homenaje a su tierra y a los suyos –a su
sangre-, en que la persistencia de guitarra, bajo y batería le hacen muy
atractiva. Para el final se reserva el spoken word de Conquistarías Europa,
que enumera un postulado justo al principio del enamoramiento aunque la forma
de cantar de Pablo no tarda en hacer estallar la canción y la postrera Herejes,
que entre aromas de western crepuscular (la referencia solo puede ser Sam
Peckinpah) vuelve a hacer apología del amor puro e incondicional ya
reivindicado en Amor, incluso utilizando alguna de sus frases. 9
canciones para unos escasos 37 minutos que no se hacen largos en absoluto, sino
todo lo contrario.
Efectivamente,
tal y como había avanzado, el disco orbita en torno al amor, pero tratándose de
Pablo G. Díaz queda claro que no es el amor que nos venden las películas
americanas, sino que trata sobre un sentimiento puro, poderoso y fuerza motriz
que provoca las acciones más desproporcionadas pero a la vez siempre teniendo
presente su ambivalencia, pudiendo llegar a ser tan hermoso como egoísta y
ponzoñoso. No olvidemos que pasar del amor al odio es cuestión de matices y que
tras el bonito aspecto de las calles de las ciudades modernas se hallan ocultos
cantidades ingentes de desperdicios y aguas residuales. Pero además del amor,
la religión y las creencias también tienen una presencia imporante en Predación; desde la portada reproduciendo el éxtasis
de Santa Teresa, hasta la carta a los corintios de Preludio Corintio,
las palabras del sacerdote en Puro y Ligero y referencias que denotan
una cotidianeidad de la religión en la vida de las personas. Precisamente esta
recurrencia amor-referencias místicas, recuerda –aunque en coordenadas
estilísticas totalmente diferentes- los primeros discos de un grupo tan
imprescindible como Surfin Bichos, con los que coinciden en la turbiedad
e interpretabilidad de las letras de sus canciones.
La
producción de Paco Loco lo ordena todo para que brillen los magníficos y
turbios textos de Pablo (de los más destacados del panorama español, sin
ninguna duda) y logra potenciarlo gracias al uso de un bajo muy presente
siempre percutiendo incansable, que actúa como motor rítmico y unas guitarras
que al aumentar su velocidad y presencia ayudan a desbordar los temas. Los
brillantes arreglos embellecen el conjunto con un punto de barroquismo mientras
Pablo interpreta los temas con el punto justo de contención, potenciando su
honestidad e intensidad y evitando que caigan en el histrionismo, excepto en
algunos gritos en Amor. Un sonido tan nítido como poderoso.
Pablo
und Destruktion ocupa, después de
cuatro discos, un lugar único en el rock español ya que podríamos definirle como
crooner, como trovador rock por la calidad de sus textos y su vehemente interpretación,
emparejándole con un mito como Nick Cave. Su intensidad y su lírica
-desasosegante, crítica y repleta de recovecos- bebiendo siempre de temas
universales como sexo, amor y creencias mientras recurre a una instrumentación
de banda de rock, huyendo del aburridísimo tópico de guitarra acústica folkie,
recuerdan irremediablemente a la bestia australiana. Aunque el mismo Pablo haya
declarado que no quiere convertirse en el maldito oficial del rock en
castellano está claro que transita por unos senderos pocos trillados y dada su
enorme calidad, hay que reivindicarlo.
Predación es
otro disco fantástico de Pablo und Destruktion,
a la altura de Sangrín y por encima
del anterior Vigorexia Emocional. Además de
la indisoluble sensación de conjunto del mismo, cuenta con temas tan destacados
como Puro y Ligero o El Mejor Traje de Seda, de los mejores de su
carrera. Predación es tan bello como amargo,
tan barroco como desasosegante, tan honesto como combativo. A pesar de ello,
creemos que el asturiano seguirá sin ser un autor para todos los públicos ya
que sus obras exigen un esfuerzo por parte del oyente y en estos tiempos de productos
prefabricados y consumo inmediato, el esfuerzo es un valor a la baja. Venced
vuestra pereza y dadle una oportunidad a Predación,
nos lo agradeceréis, estamos seguros.
RESEÑAS ANTERIORES:
VIGOREXIA EMOCIONAL
RESEÑAS ANTERIORES:
VIGOREXIA EMOCIONAL
PURO Y LIGERO
EL MEJOR TRAJE DE SEDA
EL ENEMIGO ESTÁ DENTRO
PREDACION EN SPOTI
Me encanta, soy un puto fan.
ResponderEliminarY me parece muy bueno tu artículo. Es un gran poeta y su música me llega. Reconozco que puede haber influido en mí el haber leído articulos y entrevistas. Me cae bien, el cabron.
Muchas gracias por tus palabras, me alegro que te haya gustado.
EliminarPor aquí también creemos que las letras de Pablo son sublimes, bastante por encima de la media del pop-rock nacional. Y sí, su coherencia hace que caiga bien.
Saludos